Celebrar el mes de la Solidaridad es esencial a la Pastoral del Colegio, San Gaspar, no sólo porque vivimos en Chile donde se honra a Alberto Hurtado, quien con su vida y su testimonio nos desafió a vivir cristianamente el mandamiento del Am y al le debemos un mes destinado a reflexionar y poner en práctica el valor de la Solidaridad, sino que también por la sintonía espiritual que hay entre Alberto Hurtado y San Gaspar del Búfalo a quien le debemos ser un colegio misionero, solidario, al servicio de quienes sufren.
Alberto descubre el dolor y el abandono en el rostro de los niños e indigentes de su tiempo, Gaspar nos mueve a escuchar los gritos de la Sangre en los clamores de quienes nos interpelan hoy.
Agradecemos la participación de la comunidad en la Cena Pan y Vino el pasado viernes, gracias familias gasparinas por ser siempre generosas y una vez más el espíritu solidario se volcó hacia la hermana Norma y el Hogar de niños san Roque, casa San Lorenzo.